Después de acatar un paro de 48 horas en las ciudades de Juliaca y Puno, los mineros informales de La Rinconada y Lunar de Oro (San Antonio de Putina), decidieron retornar a sus bases luego de sostener un diálogo con el jefe del Gabinete Ministerial, Juan Jiménez Mayor, y firmar un acuerdo el 1 de octubre.
En el documento se estableció un cronograma de trabajo para tratar los problemas correspondientes a cada zona donde se desarrolla actividades de pequeña y minería artesanal. Cabe indicar que el acuerdo no incluye a las zonas donde se desarrolla la actividad minera ilegal.
El documento establece que las partes fijarán como tema en la primera reunión de la mesa técnica, la comercialización de oro y que se citará a los representes de la Superintendencia Nacional de Administración Tributaria (SUNAT), ya que los mineros aducen que pagan un alto impuesto para comercializar el metal precioso.
Otro de los acuerdos fue reabrir la Mesa Técnica de Formalización Laboral, tal como se establece en el Artículo 5 del Decreto Supremo N° 027-2012-EM, a fin de garantizar los derechos laborales de los trabajadores y desde luego, su salud.
A la reunión efectuada en la sede de la Presidencia del Consejo de Ministros (PCM), asistieron el Alto Comisionado en Asuntos de Formalización de la Minería, Interdicción de la Minería Ilegal y Remediación Ambiental, Daniel Urresti Elera; el viceministro de Minas, Guillermo Shinno Huamaní y el director general de Formalización Minera, José Manuel Pando.
Mientras que representando a los mineros estuvieron presentes el titular de la Federación Regional de Pequeños Productores Mineros y Productores Mineros Artesanales (Ferpemina-Puno), Fredy Mamani Quilla y el presidente de la Central de Cooperativas Mineras de Rinconada y Lunar de Oro, Mario Ayamamani Quispe.
Cabe indicar que los mineros ilegales de Carabaya y Sandia, aún continúan acatando el paro indefinido nacional, en vista de que el Gobierno Nacional, anunció que se seguirá adelante con la interdicción, puesto que su labor en los ríos y cuencas, afecta enormemente la flora y fauna.
Fuente: Diario Los Andes
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