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| Foto: Referencial/ Internet |
Entre
los años 1986 y 1987 en el distrito de
Crucero, provincia de Carabaya se crea las rondas campesinas, en circunstancias
que se producía la toma de tierras departe de los comuneros, esta situación fue
aprovechada por los delincuentes quienes sembraban el terror en la zona,
haciéndose pasar como senderistas para
realizar sus fechorías. Esta situación impulsa a los pobladores crear esta
organización con la finalidad de dar seguridad a las mujeres que se quedaron solas y velar
por los ganados de los campesinos, ya
que los varones en su mayoría realizaban
la toma de tierras.
En
un inicio las rondas campesinas se denominan guardias campesinas, pero en el
año 1993 cuando se da el decreto que crea los comités de autodefensa las rondas
se adecuan a esta ley, de allí se expanden a toda la provincia de Carabaya y aparece
el Comité Central de Autodefensa que cumple funciones netamente de rondas, no
obstante la norma señalaba que solo estaban para dar cumplimiento a lo que
indicaban las fuerzas armadas, lo cual les restaba autonomía.
En
razón de ello empezaron a luchar por la nueva ley de rondas campesinas que fue
una iniciativa de las bases, porque según refieren los ronderos no tenían ningún amparo legal frente
a las acciones que realizaban y menos competencia
para administrar justicia. No obstante esta situación cambia en el año 2003
cuando se da la nueva ley 27908 de Rondas Campesinas, que las
define como forma autónoma y democrática de organización comunal.
Sabino
Soncco, Integrante de las rondas campesinas de Crucero refiere que las comunidades en ese entonces no tenían
seguridad, por ello se organizan como guardias campesinas para cuidar a su
población y ganado, lo cual ha tenido aceptación departe de los pobladores,
porque incluso se han conformado estas organizaciones en los barrios. “Nuestra
fortaleza es el compromiso de los miembros, porque nadie nos paga por esta
acción, pero tenemos por costumbre velar por la familia, el ayllu, y la
pachamama; la resolución de problemas
dentro de la comunidad de manera ágil, que no existe corrupción y se brinda el servicio de justicia sin costo
alguno; por eso nos hemos mantenido en el tiempo como una organización legítima
del pueblo. Lo que si buscamos es que las rondas tengan un seguro rondero,
porque siempre hay el peligro que un compañero pueda perder la vida en pleno
servicio, ya que nos hemos enfrentando
con abigeos que estaban armados”.
Agregó:
“Un reto que tenemos es luchar contra la contaminación ambiental, por eso
estamos presentes en la lucha contra la minería informal en la Cuenca Ramis,
mas aun porque Crucero es uno de los distritos más afectados”.
Actualmente,
en Crucero hay 8 bases de rondas campesinas en las comunidades de: Oruro,
Crucero, Urinsaya, Sancolli, Caricomi, Callacachi, Quisipampa y una base en el
barrio José Domingo Choquehuanca. Además cuenta con más de 4000 mil miembros, de los cuales 150 están activos y el resto en
reserva a la espera de asumir el
servicio. El próximo 29 de diciembre cumplen 26 años de
funcionamiento en esta localidad.
Rechazo al Proyecto
Inambari
Sobre
la pretendida construcción de la Central Hidroeléctrica Inambari en la
provincia de Carabaya, Sabino Soncco indica: “Nosotros hemos conversado sobre
el tema y la posición de las rondas campesinas es que no vamos a permitir la
construcción de la Hidroeléctrica Inambari, porque va dañar el medio ambiente
en la selva de Carabaya y mucha gente que convive con la naturaleza será
despojada de sus tierras, y no sabemos cuál va ser el destino de nuestros
hermanos. Lo que más nos interesa es la pachamama, nuestra tierra, el medio
ambiente que tenemos que cuidar, por eso no vamos a permitir que se construya
esta hidroeléctrica en el futuro”.







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